¿Por qué? ¿Por qué?
Tus dedos tejen
palabras de cristal que se hacen añicos sólo con leerlas.
Las esquirlas
apuntan a mi diana cerebral y se lanzan a la carrera.
Las sombras tienen
colores y se empeñan en agrietar mi cuerpo calloso, profundo y dormido.
Y también en
desolar mis sentimientos y en pulverizarlos en hosco cenizo.
Dime la razón.
Pretendo que
desaparezcas del todo de mi conocimiento y de mi conciencia.
Tienes tu vida. Tus
horas de hastío, miedo, desolación y cansancio acabaron.
Horas que pretendí
hacer mías. Horas de compañía en la noche, de luz falsa.
Tiempo de marrones
horas, de grises silencios y de azules risas.
Dame un argumento.
Pretendí, sin
permiso, tomar contigo tu pequeña taza de café caliente.
Sentir tus dedos
suaves desordenar la tranquilidad de la
porcelana.
Degustar en tus
labios el sabor de la amargura de tus lágrimas .
Acariciar tus ojos
y liberarlos del peso de las horas de insomnio.
Quise ser la lluvia
que abrigara tu cuerpo en las horas sin acuerdo.
Imaginé ser el aire
que limpiara tu corazón de pena y lo llenara de vida.
Me ofrecí a ser el
muñeco que recibiera tus palos y el saco de boxeo de tus golpes.
Te mostré los
caminos libres de las piedras de la ignorancia y del desaliento.
Explícamelo.
Si no te hago
falta, por qué sigues llamando a mis sombras verdes.
Si me has
despreciado porque tu razón no entiende ni vuela conmigo
Por qué continúas
estando a este lado buscando un alivio.
Será que requieres
tener en tu vital batalla el mismo enemigo.
Aclara el motivo.
Y si no puedes
porque sólo quieres probar a hacer pulsos prohibidos,
Si sólo deseas
seguir la pelea de idiotas que un dia ya nos propusimos,
Si únicamente te
miras en ti y en tus lienzos réprobos de
amargo optimismo.
Si soy tu miseria,
tu cruel realidad, tu odio, tus límites y tu yo dormido.
Dame una razón,
sólo una por la cual sufrir esta noche por ti.
Y a pesar de que en
tu camino tu vida su ascenso haya permitido
Y en mi pesar
camino al infierno se ha decidido, el infierno que vivo,
Dame una razón para
soportarlo.
Y entonces por
ella, por esa razón,
Me quedo contigo.
All rights belong to its author. It was published on e-Stories.org by demand of Maria Teresa Aláez García.
Published on e-Stories.org on 29.12.2007.
Artigo anterior Próximo artigo
Mais nesta categoria "Lamento" (Poems em espanhol)
Other works from Maria Teresa Aláez García
Gostou deste artigo? Então dê uma olhadela ao seguinte: